Ya han sido varias quedadas desde la primera, aunque no haya contado nada por aquí. Y es que llego con tantas ganas de tejer y charlar que se me olvida completamente hacer fotos. Y sin fotos parece que no hicimos nada.
En realidad en esta última sólo hice una fotillo mientras esperaba a las demás tejedoras. Y en seguida empezaron a llegar.